Tea time

Amaneció una mañana de viernes en un día de verano, y el sol asomó su rostro tímidamente por detrás de los grises nubarrones que empezaban a deshilacharse en el horizonte para dar comienzo a un nuevo día.
Después de tantos días y noches de calor abrasador por fin una tregua se vislumbra en el horizonte.
El fin de semana se avecina nublado y quizás las gotas de lluvia caigan desde las grises nubes que cubren en estos momentos el sol, arrancando el olor a tierra mojada y haciendo brillar el pavimento que en los pasados días humeaba por las altas temperaturas.

Un pájaro está afanoso limpiándose las plumas en el tiesto de mi rosal enano que ya tiene 4 preciosos y olorosos capullos de color rosa oscuro, y otro comienza a despuntar sus ojitas rosas entre el verde impregnando con su aroma encapsulado el espacio a su alrededor.
Desde el sofá en el que me encuentro, puedo escuchar el trinar de los pájaros en los tejados que circundan mi piso, mientras un tenue rayo de sol se cuela entre las nubes e ilumina una parte del patio interior haciendo brillar la hierba como esmeralda liquida.

El bordado se va definiendo poco a poco, como una pintura en un lienzo en blanco, los colores vivos del diseño de Jeremiah manchan la tela con su exhuberancia.
Acostumbrada a los últimos diseños de LHN, con tonos de color tan tenues, tan sutiles, ahora el Tea Time sampler usa colores muy vivos que resaltan en la tela de lugana de color blanco como una mancha de tinta en un papel arrojada por un niño.
Ya los libros y la tetera, junto con el bote que contiene el aromático te de hierbas, se pueden ver en una estantería a medio terminar.

poco a poco el trabajo de bordar puntada tras puntada empieza a dar su fruto.

Feliz día amigas

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Cuando todos los días resultan iguales es porque el hombre ha dejado de percibir las cosas buenas que surgen en su vida cada vez que el sol cruza el cielo.
Paulo Coelho